Con el Psicólogo Enrique Calvo (izda) observando la pradería de la marisma de Sanlúcar en primavera.
El Programa de Investigación “Las Huellas de la Memoria” está trabajando en preparar los numerosos cursos y actividades formativas que tendrán lugar en el término municipal de Sanlúcar de Barrameda y Doñana desde 2.010 a 2.012. Recordamos una vez más que el programa de investigación se presentó en Sanlúcar en el año 2.006 por Federico Mayor Zaragoza y Javier Castroviejo.
En el acto estuvo involucrada la Fundación “Eduardo Domínguez Lobato”, que ya nada tiene que ver, desde ese mismo año de 2.006 con esta actividad investigadora. Durante finales de 2.006 hasta la actualidad se ha puesto la atención en numerosos conceptos que se necesitaban aclarar antes de comenzar con actividades más prácticas que aportarán medidas que beneficiarán a la población sanluqueña. 
Federico Mayor Zaragoza el día de la inauguración oficial del Programa de Investigación en el Auditorio de la Merced, en Junio de 2.006
El Programa de Investigación “Las Huellas de la Memoria” analiza principalmente las relaciones que mantenemos los ciudadanos con el entorno natural, rural y urbano. Pero se introduce en variados recovecos sobre cómo percibimos elementos culturales y sociales, según la personalidad de cada habitante, su formación humanística, sus condiciones de vida, su edad, su memoria, sus recuerdos. Para ello una serie de grandes profesionales nos han ido ayudando y colaborando, además de instituciones públicas y privadas. Todos esos condicionantes citados influyen muy directamente en la conservación de nuestro patrimonio natural e histórico, aunque también en otras cosas importantes.
¿Y para qué estos estudios? ¿o por qué?. A nadie se le escapa que vivimos etapas en nuestra sociedad bastante convulsas, acentuadas con las diferentes crisis que vivimos actualmente. Hay que precisar que este Programa empezó a gestarse en 2.003, antes de que llegáramos a estas crisis financieras. La preocupación surgió en los inicios de esta investigación por el derroche de presupuesto público y conservar espacios protegidos sin resultados efectivos. Y cuando no era ya el Parque Nacional de Doñana, era el Patrimonio Histórico de la ciudad de Sanlúcar, y cuando no la condena que habíamos ejercido sobre el mundo rural, -en peligro de extinción-, y el medio ambiente, y las relaciones humanas, y la corrupción, y conductas problemáticas en ciertos grupos de adolescentes y jóvenes, y un largo etcétera.
Fue en una larga conversación con José Chamizo, Defensor del Pueblo Andaluz, al que conocía desde sus batallas con los narcotraficantes en el Campo de Gibraltar, donde coincidimos en que muchos de los problemas que siguen siendo de máxima actualidad, no se terminaban de afrontar realmente porque no se buscaban las raíces de donde procedían. Yo observaba desde muchos años atrás que era cierto. Que muchos problemas graves tenían una misma raíz. Y eso es lo que nos propusimos hacer. Fui pidiendo la colaboración de grandes profesionales que hemos elaborado interesantes argumentos que nos permiten entender mejor la vida.
José Chamizo, hoy Defensor del Pueblo Andaluz, en un programa de TV que hicimos juntos en 1.993 titulado "El sentido de la vida"
De ahí la importancia de seguir hasta 2.012 con estas investigaciones. Lo importante es que ahora viene una fase más pública y práctica. Empezaremos con cursos formativos, actividades educativas, con la colaboración de más de un centenar de científicos, historiadores, psicólogos, antropólogos, escritores…que harán quizás más atractiva estas experiencias.
La primera de ellas está relacionada con “La adaptación afectiva al paisaje de Sanlúcar de Barrameda”. Es imprescindible la colaboración del Ayuntamiento, que como anunciamos, ya estamos en un proceso de firmar los respectivos convenios. Esperamos poderlo hacer antes de final de año, para empezar las gestiones oportunas. Es una experiencia apasionante donde cada ciudadano tendrá la posibilidad de encontrar la motivación imprescindible para realizar como un redescubrimiento del término municipal y de sí mismo, con algo tan natural como el autodescubrimiento. Es como si cada habitante se convirtiera en científico, en investigador de su propia persona, y de su ambiente.
Además, ya lo estamos ultimando, contaremos con la ayuda de Miguel de la Quadra Salcedo, Manuel Toharia, Miguel Delibes de Castro, Juan Luis Arsuaga, Odile Rodríguez de la Fuente, Elsa Punset, Eduardo Punset, Elena Ochoa, Javier de Felipe, Javier Castroviejo, Luis Rojas Marcos, Antonio Piñero, Cristina Cruces, con los que ya hemos contado en su gran mayoría en estos años.
Manuel J. Márquez Moy , Coordinador del Programa de Investigación "Las Huellas de la Memoria"
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